Es plana, de un tamaño superior al resto de variedades. Se distingue por su color verde de tono claro con algunos granos más oscuros. De piel muy fina, destacando su ternura y sabor suave y característico. Necesita más tiempo de cocción, pero los resultados son inmejorables manteniéndose entera tras la cocción. Es la más indicada para elaborar guisos y potajes, y muy vistosa en platos fríos ya que acepta muy bien las distintas técnicas culinarias.