El eucalipto utilizado en vapores expectorantes o en infusiones, ayuda a las vías respiratorias, calma la garganta, faringe y cuerdas vocales.
-
Infusión de eucalipto sola: Esta es la forma más sencilla de preparar una infusión con hojas de eucalipto. Simplemente agregue hojas frescas de eucalipto a agua caliente y deja que se infundan durante unos minutos. Esta infusión es conocida por ayudar a despejar las vías respiratorias y aliviar la congestión nasal.
-
Infusión de eucalipto con menta: Combina hojas frescas de eucalipto con hojas de menta para una infusión refrescante y vigorizante. Esta mezcla es excelente para aliviar la congestión nasal y mejorar la respiración.
-
Infusión de eucalipto con limón: Agrega rodajas de limón a una infusión de hojas de eucalipto para obtener un sabor cítrico y refrescante. Esta combinación es excelente para fortalecer el sistema inmunológico y aliviar la garganta irritada.
-
Infusión de eucalipto con miel: Endulza tu infusión de hojas de eucalipto con un poco de miel para obtener un sabor suave y reconfortante. La miel también proporciona propiedades antibacterianas y ayuda a aliviar la irritación de la garganta.