Jengibre dados sin azúcar es el más intenso y fresco de las tres variedades, una vez sometida al proceso de deshidratación multiplica sus propiedades gracias a la concentración de sus nutrientes durante el proceso de secado. No tiene que faltar en tu despensa lo puedes utilizar para la terminación de platos como pollo al curry o chutneys, también como snack ideal para galletas, biscochos y repostería o ¡en una tabla de quesos!
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Color: Los trozos de jengibre confitado sin azúcar pueden variar en color, pero generalmente son de un tono marrón claro a dorado, dependiendo de cómo se preparen y se cocinen. Es posible que carezcan del brillo que a menudo se asocia con el jengibre confitado endulzado con azúcar.
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Sabor: El sabor del jengibre confitado sin azúcar es predominantemente picante y ligeramente dulce, pero menos dulce que el jengibre confitado tradicional. Pueden tener una nota más intensa de jengibre debido a la ausencia de azúcar para suavizar el sabor.
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Textura: La textura del jengibre confitado sin azúcar puede ser firme pero aún tierna, similar a la del jengibre confitado regular. Sin embargo, dado que no se usa azúcar, la textura puede ser un poco menos pegajosa o cristalizada en comparación con las versiones endulzadas.