La manzanilla dulce egipcia, también conocida como camomila egipcia, tiene cualidades organolépticas distintivas que la hacen apreciada tanto en la gastronomía como en la medicina tradicional. Algunas de estas cualidades incluyen:
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Sabor dulce y suave: A diferencia de la manzanilla amarga, la manzanilla dulce egipcia tiene un sabor dulce y suave que la hace agradable al paladar. Este dulzor puede ser sutil pero distintivo, proporcionando un contraste agradable con su suave amargor.
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Aroma floral: La manzanilla dulce egipcia tiene un aroma floral delicado y reconfortante. Este aroma a menudo se describe como suave, floral y ligeramente almizclado, con matices de manzana fresca. Es esta fragancia lo que da nombre a la planta, ya que su aroma recuerda al de las manzanas.
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Tono terroso: Además de su dulzor y su aroma floral, la manzanilla dulce egipcia puede tener matices terrosos en su perfil organoléptico. Estos matices terrosos añaden profundidad y complejidad a su sabor y aroma, proporcionando una experiencia sensorial completa.
